Siempre he estado
rodeado de mala suerte y no de un modo pesimista, no, no, lo mío es realmente
perturbador e inclasificable, a mi lado Murphy podría decirse que es un tipo
con estrella.
Así que cuando abrí
la puerta y aquella sombra me ofreció
el paquete, bueno que queréis que os
diga nadie en su sano juicio lo hubiera rechazado.
Visto ahora y con mi yo realista en alza nunca debí atenderla, sólo podía tratarse de una muesca más en un camino plagado de socavones.
Visto ahora y con mi yo realista en alza nunca debí atenderla, sólo podía tratarse de una muesca más en un camino plagado de socavones.
Y mira que el trato
era viable, mil noches muriendo de la forma más desagradable y poco a poco mi
vida se encauzaría. Me promoverían en el trabajo, eso haría que ganara más dinero,
con el dinero compraría una mejor casa, mi posición social ascendería y el
súmmum conocería a una preciosa mujer, ¿y quién sabe? puede que, ¡hijos! Pero
no, claro no.
¡Ni siquiera pedía
tanto!
Mirad yo me reconozco
como a un hombre paciente y que sabe esperar su turno. Sueles ser así cuando toda
tu vida has estado embadurnado en el lodo, te vuelves de otra pasta, no temes la
espera y hasta logras empatizar de una manera extraña con el dolor, pero tampoco
soy tonto y me daba cuenta que mi provenir
no llegaba y que todo aquello olía a timo.
Y llegó la noche, la
que me dio el valor suficiente para no tener que aguantar más toda aquella
pesadilla, la 603. Desde luego fue la más desagradable, que invadan cientos de
cuervos tu habitación vale, pero que te picoteen el cuerpo entero en busca de
las entrañas no sólo es molesto sino que duele muchísimo.
Nada más amanecer y
esperar el tiempo suficiente para que mi cuerpo se recompusiera, como si de un
muñeco de plastilina se tratara, llamé a atención al cliente. No iba a pasar más
por todo aquello, codiciaba mi buenaventura, ¡ya!
Me mantuvieron a la
espera más de veinte minutos, escuchando esa repetitiva y fastidiosa melodía que cualquiera diría que guarda oscuras intención, como inducirte a colgar el
aparato.
Cuando al fin me
atendió una operadora mi sorpresa fue mayúscula.
Todo había sido un error de la comercial, mi ya enemiga declarada se había
dejado de rellenar unos formularios, los cuales validaban la operativa. Desde ese punto
todos veríamos una fácil solución, ¿no? Bueno yo por lo menos sí, emendar el
fallo de la sombra y estar a favor
del perjudicado es decir, yo.
Pero no, restar
esos fatídicos 603 días de mi vida y darme lo que me correspondía era del todo
menos sencillo. Ni siquiera podía reclamar el dinero, las devoluciones tenían
una validez máxima de 30 días, ¡qué vergüenza de letra pequeña! La única
solución era volver a pagar y empezar de cero, disgustado como me hallaba sólo atinaba a visualizarme de nuevo electrocutado, desmembrado,
quemado, picoteado…
La verdad, no creía posible volver a soportar todo aquello.
La verdad, no creía posible volver a soportar todo aquello.
Estaba a punto de
renunciar cuando la simpática operadora me ofreció como compensación el paquete vip, éste incluía un coche
nuevo.
CONCURSO DE RELATOS: Mil maneras de morir
¡Ya no saben que nueva estafa telefónica inventar! Ja, ja, ja. Pero claro, después te tratan de cliente VIP y vuelves a caer.
ResponderEliminarUn relato muy divertido, Irene. Buena suerte en el concurso.
jijiji si es que nos engañan como quieren!!! ;)
EliminarMuchísimas gracias Bruno.
Un fuerte abrazo, :)
¿Esa sombra se equivocó de piso?
ResponderEliminarLa mala suerte persigue a este tipo de tal manera que se hace agobiante.
Ya recelaré cuando llamen a mi puerta, o suene el teléfono ¿Pero y si se trata de una oferta nueva? ¡Jó! que sin vivir...Peor que la muerte por picoteo.
suerte compañera con el concurso.
Y besos
Sí, la verdad que es que a este pobre hombre la mala suerte le acecha de una manera exagerada, jejeje
EliminarMuchísimas gracias Francisco, ;)
Besos.
Menudo paquete le cayó a tu protagonista, Irene.
ResponderEliminarMil y una maneras de morir, una detrás de otra, y a cual más infame.
¡Qué Murphy nos coja confesados!
Un relato divertido y muy original.
¡Abrazo, Compi de Letras!
¡Mucha suerte en el concurso! ;)
Paquete, paquete pero por lo menos (ironizando) VIP, jajaja
EliminarMe alegro mucho que te hayas divertido Edgar, :)
Un fuerte abrazo, compi! ;)
¡Qué gran sentido humor has desplegado con este cuento! Desde luego tener que cargar con el "paquete" y encima con esos "daños colaterales" por culpa del papeleo y del "cabeza hueca" del "jefazo" ¡NO HAY DERECHO! Me alegro que el prota hiciera su reclamación correspondiente. ¡Qué fastidio de melodía! "No cuelgue y espere un momento"... ¡Menos mal que el paquete VIP incluía un coche nuevo! ja,ja,ja ... Yo que el protagonista mejor lo cambiaba por una VIDA NUEVA ¿no te parece?.
ResponderEliminarNo hace falta que te diga, querida amiga Irene, que me he reído un montón con estos "paquetes" y las peripecias del protagonista. ¡Me encantó!
Un besazo enorme y mucha suerte con el concurso.
Síii yo creo que el pobre justo buscaba eso, una nueva vida. Pero con su mala suerte y una malísima gestión era imposible que lo consiguiera. Si es que... una lástima, jijiji
EliminarMe alegran muchísimo esas risas, :D
Muchos besitos, y GRACIAS!!! ;)
Un paquete con mucha originalidad. Suerte en el concurso Irene
ResponderEliminarMuchísimas gracias Maria del Carmen, :)
EliminarUn fuerte abrazo.
Muy bueno Irene, me ha encantado tu relato, que me ha parecido muy original y me he reído hasta el final. Maldito "error de papeleo", pobre chaval. Aunque el paquete Vip es muy persuasivo... jajaja. Un abrazo y mucha suerte, compañera de letras! ; )
ResponderEliminarLa mala jugada que nos puede causar un error de papeleo, ;) Aunque a este pobre, su mala suerte ya le va de serie, jeje
EliminarMe alegro muchísimo de esas risas, :D
¡Muchas gracias!
Un fuerte abrazo, compi!
Esa "sombra" que acompaña al pobre hombre con tan mala suerte, le va ofreciendo "paquetes", soluciones a la que engancharse y siga muriendo de diferentes formas. Ninguna parece ser de feliz.
ResponderEliminarEse hombre tiene que deshacerse del "paquete" antes de que pese demasiado. Cualquier ofrecimiento proveniente de la "sombra" trae malas pulgas.
Ni que decir, me ha parecido aparte de original, de una sutileza humorística, con aprendizaje incluido.
Sencillamente me encantó leerte, y te deseo el premio del concurso.
Muchos besos, Irene.
Pues sí querida Mila lo que tiene que hacer es justo eso, deshacerse del 'maldito' paquete, jeje
EliminarPero es que un coche, es un coche ;)
Gracias por esta valoración tan positiva, me alegra muchísimo!
¿Por qué no te presentas?
Estoy segura que lo disfrutarías, :)
Muchos besitos!!!
Saludos Irene, muy original tu relato. Como dicen, el niño que es llorón y la madre que lo pellizca, porque si bien al protagonista lo persiguen esos paqueteros, se ve que él también tiene debilidad por los paquetes, y no rechaza ninguno :). Éxitos y bendiciones!
ResponderEliminarEs verdad, por ahora solo se queja pero acepta todo lo que le dan, aún sabiendo que es malísimo para él.
EliminarEsperemos que algún día aprenda la lección y no permita que lo engatusen más.
Muchas gracias, Mery! ;)
Un abrazo.
Pues sí que tenía mala suerte el tipo, je,je. Y para colmo lo de la centralita. =P
ResponderEliminarMucha suerte, Irene.
Un abrazo, guapa. =)
Sí Soledad demasiada mala suerte, jeje
EliminarMuchísimas gracias, guapa!
Un fuerte abrazo.
¡Pobrecito! Las mil y una le ha hecho pasar esa sombra.
ResponderEliminarEntretenido y divertido relato. Mucha suerte
Muchas gracias Mirna, ;)
EliminarMala suerte tiene y mucha, pero también se fía demasiado de los demás, jeje
Un abrazo.
He disfrutado este relato tan original que compartes con nosotros, es realmente de una creatividad e imaginación admirable. Es la primera vez que vengo por aquí y, si lo permites, vendré a curiosear nuevamente entre tus cosas. Te mando mis mejores deseos para el concurso (te mereces el galardón) ¡Muchas suerte!
ResponderEliminarAriel
Me alegro muchísimo de que lo hayas disfrutado Ariel, :)
EliminarMás que permitido, estaré súper encantada de recibirte. Estás en tu casa, ;)
¡Gracias!!! Y suerte.
Un abrazo.
Menuda imaginación la tuya, Irene, y menuda mala suerte la de tu protagonista jajajaja. La verdad es que cuando se trata de ofertas "tan buenas" como la que él recibió hay que estar muy atento a la letra pequeña y a las condiciones "particulares" :P
ResponderEliminarBuenísimo, y muy original. Ojalá que tengas muuuucha suerte en el concurso :))
¡Besos de jueves!
Mala suerte, muchíiisima jajaja
EliminarNo hay que fiarse, y siempre leer la letra pequeña (aunque sea con lupa) jiji
Muchas gracias por tus palabras Julia, ;)
Besos y feliz fin de semana!
Divertido y ameno Irene. Mucha suerte en el concurso. Un beso grandote
ResponderEliminarMuchísimas gracias Mercedes, :)
EliminarBesitos!
Jeje Irene, me has hecho pasar un rato divertido con el relato. Suerte en el concurso, un saludo!!
ResponderEliminarDe eso se trata de disfrutar, ;)
EliminarMuchas gracias Sonia!
Un abrazo.
Me he reído un montón, no solo por la historia en sí sino por la frescura que transmite la narración y que le da el tono perfecto. Me he quedado en ascuas pensando en el contenido del paquete VIP. Muy original!!
ResponderEliminarMe alegro un montón de esas risas, David jeje
Eliminar¿Quién sabe? Puede que de aquí a mil noches, le de por explicar que fue de... ;)
Muchísimas gracias por pasarte y comentar, :)
Un abrazo.
Buenas, voy a confesarte algo. Me he leído este texto dos veces. La primera fue hace tiempo y bueno, quizás no era mi mejor día como lector que me perdí un poco y no pude hacerme una opinión. Hoy lo he releído y ya he tenido una mejor posición para escribirte jeje. Este pack mortal me hizo pensar en una historia de S.King en la que un fumador empedernido acepta someterse a una dura terapia para dejar de fumar. Si no la has visto te la recomiendo para leer o buscar en la película donde aparecía. Una buena oferta interactiva que ofrecía al personaje mucho y no le dio nada bueno, al menos por ahora.
ResponderEliminar¡Un beso y suerte!
Cómo has vuelto y entre medias te has confesado no te lo tendré en cuenta, jeje
EliminarNo pasa nada JC, te comprendo y agradezco que hayas vuelto eso dice mucho de ti y muy bueno. A veces pasa, a mí la primera no es el momento de una lectura y por más que lo intentemos no hay manera y luego la vuelves a coger y dices, ah.. bueno (el tostón se ha vuelto ligero) jeje ;)
Lo dicho que gracias por estar presente, para mí eso vale muchísimo! :)
Besos y la misma suerte para ti, aunque si se juntan Melvin y esta sombra se avecina el fin, jajaja
Muy original y divertido, a pesar de las desdichas.
ResponderEliminarAbrazo!!!
Muchísimas gracias Mª Jesús, ;)
EliminarUn fuerte abrazo!
He llegado a tu blog gracias al comentario que dejaste en el mío, Irene.¡Menudo relato más chistoso me encuentro!.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho leerte y deseo que tengas mucha suerte.
Besos
Si te ha traído hasta aquí, no sabes cómo me contenta ese comentario Chelo, :)
Eliminar¡Gracias por quedarte!
Me alegro que te haya gustado, ;)
Besos!